COMENTARIO:
Se dice que en acto amoroso, no
solo existe
una descarga de libido, la energía de la
pulsión sexual, sino que también
se
produce una descarga de agresividad
cuyo vehículo es la musculatura.
Demostrando
que falta de satisfacción sexual
no solo imposibilita la descarga del libido
sino
también la descarga de las pulsiones destructivas
inhibidas en su fin que
se manifiestan en las
acciones en las que se usa la musculatura,
por ejemplo: Abrazos,
penetración,
movimientos varios, etc. Y así la
agresividad no descargada
relacionada
con las pulsiones destructivas y de
dominio incrementan aún más la
que ya dispone la estructura súperyoica,
atacando a veces despiadadamente, al propio sujeto.
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